Hasta el 15 de septiembre las zonas más turísticas podrán abrir de 10.00 a 18.00 horas todos los festivos
Acuerdo en horarios comerciales en Barcelona. Los comercios podrán abrir todos los días hasta el próximo 15 de septiembre.
El horario de los festivos que se ha acordado es de 10.00 a 18.00 horas, y no solo en Ciutat Vella y el Eixample, sino que se exteinde a zonas de Sants-Montjuïc y Gràcia y el Camp de l'Arpa (Sant Martí).
El acuerdo afecta a los comercios situados en las zonas turísticas de la ciudad abrir ocho horas los domingos de verano, y que deja fuera a las grandes superficies comerciales, que no se encuentran situadas en zonas de interés turístico.
Condiciones
De esta manera, los comercios de la zona turística barcelonesa podrán abrir los domingos de los meses de julio, agosto y hasta el 15 de setiembre. El acuerdo contempla que, además, podrán hacerlo entre las 10.00 y las 18.00 horas, en vez de entre las 10.00 y las 14.00.
Gran parte de las ventas
El acuerdo llega en unos momentos cruciales para el comercio barcelonés, en el que los extranjeros suponen gran parte de la actividad en algunas zonas. La vieja aspiración de que Barcelona se convierta en ciudad de compras al estilo de otras capitales europeas parece más cerca que nunca, pero requerirá un acuerdo en profundidad no solo para el verano.
Propuesta de los comercios
La propuesta de los comerciantes del centro de Barcelona sigue siendo que sea posible abrir ocho horas, en horas centrales del día, los festivos de primavera y de otoño, que es "cuando el turismo está más centrado en las compras de ciudad", aunque, a la larga y de manera gradual, el escenario óptimo para la asociación sería que las zonas turísticas abrieran todos los festivos durante todo el año.
Turistas de invierno
La solución de abrir en verano satisface solo en parte al sector comercial, ya que el turismo de verano que llega a la ciudad no es tan aficionado al 'shopping'. En invierno las compras de los extranjeros en la ciudad son más elevadas.
Hábitos de consumo
El sector comercial del centro de Barcelona duda de que la apertura de comercios en festivos afecte al resto de tiendas de la ciudad, ni siquiera que tenga efectos en los hábitos de consumo de los habitantes habituales. Sí que es cierto que hasta el 70% de las ventas en los ejes comerciales del centro se dirigen a extranjeros en la actualidad (incluso grandes almacenes) y que esa es una oportunidad de negocio que el sector está dispuesto a defender.
Noticia El Periódico